Predicar con el ejemplo: Conozca al cirujano plástico del Hospital Shriners para Niños Boston, Dr. Daniel Driscoll

El Dr. Daniel Driscoll ha tratado a niños de todo el mundo, especializándose en cirugía reconstructiva pediátrica para lesiones por quemaduras y afecciones congénitas. Un Shriner él mismo, está profundamente comprometido con la misión de Shriners Children's y con enseñar a la próxima generación de cirujanos sobre las complejidades de la reconstrucción de quemaduras.

El Dr. Driscoll creció en la zona norte de Boston y tuvo una temprana exposición a la medicina mientras acompañaba con frecuencia a su padre, un médico de familia, en las visitas domiciliarias. Obtuvo una mayor exposición al entorno hospitalario cuando su padre lo ayudó a encontrar trabajo como conserje en el Hospital Hunt en Danvers.

Después de graduarse de Dartmouth College y Brown University Medical School, el Dr. Driscoll se formó en el Hospital General de Massachusetts en cirugía plástica y general. Fue allí donde conoció al Dr. Matthias Donelan, un cirujano plástico pionero en el Hospital Shriners para Niños Boston. El Dr. Donelan lo reclutó para completar una beca de posgrado en reconstrucción de quemaduras pediátricas. El Dr. Driscoll se unió al personal médico del Hospital Shriners para Niños Boston luego de ser contratado por el difunto Dr. Ronald Tomkins. Se especializa en cirugía reconstructiva de lesiones faciales por quemaduras, así como anomalías congénitas, incluida la microtia. La microtia es una afección de nacimiento en la que una o ambas orejas son pequeñas o no están formadas correctamente.

Según el Dr. Driscoll, la atención holística brindada durante la infancia de un paciente es lo que hace que el Hospital Shriners para Niños Boston sea único. “La atención de quemaduras implica un gran esfuerzo de equipo, desde el tratamiento de quemaduras agudas hasta la reconstrucción quirúrgica”, expresó. “Tenemos mucho talento aquí. Nadie más ofrece lo que hacemos”.

El enfoque del Dr. Driscoll para la reconstrucción de quemaduras pediátricas implica una metodología lenta y estratégica, centrada en su capacidad para ver a los pacientes con regularidad mientras se recuperan de sus lesiones agudas. “Si podemos hacer lo que se necesita de inmediato para los niños con lesiones por quemaduras y esperar nuestro momento hasta que las cicatrices mejoren, entonces el proceso general de reconstrucción facial avanza mucho mejor”, dijo. “Se trata de estrategia y sincronización, y de progresar en cada paso del camino”.

Esta filosofía encarna la Misión de Shriners Children's de brindar cuidados centrados en la familia. “El objetivo es hacer todo lo que podamos en cada visita sin estresar demasiado al niño ni a la familia”, dijo el Dr. Driscoll. “Entonces podemos mirar hacia adelante y planificar nuestro enfoque para su próxima visita. El sistema Shriners tiene una capacidad única en este tipo de atención y reconstrucción a largo plazo”.

Su interés en la atención de quemaduras a nivel internacional ha llevado al Dr. Driscoll por todo el mundo, viajando a clínicas de ayuda en República Dominicana, Puerto Rico, Ucrania y Colombia. El enfoque de su trabajo misionero no es solo tratar a los pacientes, sino también mejorar la educación global sobre la atención de las quemaduras. Cuando los casos internacionales complejos se remiten al Hospital Shriners para Niños Boston, estas colaboraciones permiten la continuidad de la atención después de que los pacientes regresan a su país de origen.

La asistencia que reciben las familias con la coordinación del viaje y el alojamiento cuando vienen al Hospital Shriners para Niños Boston contribuye a los resultados exitosos que logra el Dr. Driscoll. “Si podemos planificar ver a un paciente con regularidad, no tenemos que forzar la situación y obtener un resultado imperfecto”, dijo. “Planificar ese tipo de trayectoria es lo mejor para el niño”.

Después de estar comprometido con la misión de Shriners Children’s durante más de 20 años, el Dr. Driscoll se convirtió en Shriner en 2020. Es miembro del Aleppo Shrine Center y el Simitar Mason Lodge, ambos ubicados en Wilmington, Massachusetts. Reflexionando sobre su decisión de unirse a la fraternidad, expresó: “Creo que la caridad es maravillosa e increíblemente valiosa. Quería ver cómo podía contribuir al hospital y a la organización benéfica”.

El Dr. Driscoll ha publicado innumerables artículos en revistas y ha escrito numerosos capítulos de libros sobre su metodología para la reconstrucción de quemaduras faciales. Presenta a nivel nacional e internacional temas de cirugía plástica y reconstrucción de quemaduras, y dirige un grupo de interés especial en reconstrucción para la Asociación Estadounidense de Quemaduras.

El Dr. Driscoll también asesora a residentes de cirugía plástica en el Hospital Shriners para Niños Boston, una oportunidad que valora mucho. “Trabajo con personas muy inteligentes que me desafían tanto como yo a ellos”, dijo. “La reconstrucción pediátrica de quemaduras es un nicho muy pequeño dentro del campo de la cirugía plástica. Es importante documentar nuestra experiencia concentrada, evaluar cómo podemos hacer mejoras y compartir ese conocimiento con otros en el campo”.