Homenaje a Ron Gingras
Mientras el mundo se acerca a agosto y muchos esperan el otoño de 2020, Ron Gingras se prepara para un tipo diferente de transición: su jubilación. Con más de 43 años de servicio al sistema de atención médica de los Hospitales Shriners para Niños y una lista tan extensa de contribuciones que ha realizado en el campo de ortopedia y prótesis (O&P), Ron tiene suficientes recuerdos para reflejar.
Desde su escritorio en el departamento de Servicios ortopédicos y prostéticos pediátricos (POPS) de Hospitales Shriners para Niños de Florida, le preguntamos a Ron cómo se sintió acerca del próximo capítulo de su vida.
"Tengo sentimientos encontrados, estoy feliz y triste", dijo Ron mientras quitaba los libros del estante. "Mi equipo y yo somos una familia y juntos hemos logrado cosas increíbles. [Al repasar los años], parece que todo pasó muy rápido".
Convertirse en un niño Shriners, y aprender los "trucos" de O&P
La relación de Ron con los Hospitales Shriners para Niños comenzó cuando era un niño joven. Cuando tenía 4 años contrajo polio y quedó con una pierna paralizada y movilidad limitada. Sus padres lo llevaron al ortopedista de su ciudad natal en Massachusetts, quien lo derivó a los Hospitales Shriners para Niños de Springfield para una evaluación. Si bien Ron sobrevivió al letal poliovirus, necesitó de múltiples cirugías cuando era adolescente para corregir las deformidades en su rodilla, cadera y tobillo. Pasó por varias pruebas y recibió muchas férulas hasta que fue "viejo" para nuestra sistema.
A los 20 años Ron comenzó a tomar clases nocturnas en una escuela preparatoria. En sus días libres comenzó a trabajar como voluntario en el área de O&P del Hospital Shriners de Springfield. "La relación que tenía con el personal era especial y todos eran muy amables", contó Ron. "Tenía una conexión con el lugar, quería volver y retribuir".
Fue en ese entonces que descubrió su pasión por la ortopedia y las prótesis. Un mentor en los Hospitales Shriners para Niños de Springfield le enseño a hacer férulas pero Ron dijo que "siempre lo seguía molestando para que me enseñe más". Cuando un técnico renunció, le ofrecerieron el puesto a Ron pero, rápidamente, se dio cuenta de que necesitabas más educación. Por eso, Ron se inscribió en Delgado College en New Orleans, una de las únicas dos escuelas con programas de ortopedia y prótesis que había en el país en ese momento. Recibió sus certificados postgrados en O&P de la Northwestern University de Chicago, y poco después de haber sido nombrado director adjunto de ortopedia y prótesis en los Hospitales Shriners para Niños de Springfield.
La construcción de POPS, desde sus planos hasta su certificación
Después de dos años en su nuevo rol en el Hospital Shriners de Springfield, se inauguró otra puerta para Ron. Los Hospitales Shriners para Niños estaban construyendo un centro en Florida, y necesitaban a alguien para el área de O& allí. John Ogden, M.D., el primer jefe de personal en Tampa, alentó a Ron para que se postule al cargo y se una a él en el flamante hospital. Ron y su esposa, Ann, armaron el equipaje y se mudaron al sur en 1984. Ron fue nombrado el primer director del departamento que, más adelante, se conocería como POPS. Un año después, luego de que Ron ayudó a armar su departamento desde cero, Shriners Healthcare for Children de Florida abrió sus puertas en octubre de 1985 y comenzó a brindar atención a niños.
Sin embargo, apenas estaba empezando. Luego de llegar a Tampa, Ron rápidamente se dio cuenta de que el estado no tenía leyes ni requisitos formales de licencias. "Personas sin capacitación ni educación podían confeccionar extremidades y férulas", explicó Ron. "Es por eso que recorrí el estado dando charlas y explicando por qué era importante tener licencias".
Ha formado parte de un sinfín de juntas y comités ejecutivos durante su cargo, entre ellos, la Florida Association of Orthotists and Prosthetists. Como presidente de su junta directiva, Ron trabajó incansablemente para estandarizar cada nivel de licencia.
"Creo que esa es una de las cosas por las que estoy más orgulloso", expresó Ron. "Existieron otras leyes de licencia que no tuvieron éxito, pero la nuestra fue la primera en tenerlo. Gracias a ello, les dimos recursos a personas con discapacidades. No siempre fue fácil pero sí fue, y todavía lo es, un momento muy gratificante de mi carrera".
Una vez que sentó las bases de la capacitación y las certificaciones requeridas, Ron comenzó a concentrarse en formas de ayudar a sus colegas ortopedas y protesistas a recibir esa capacitación. Ayudó a establecer una escuela técnica en el St. Petersburg College (SPC) para proporcionar educación formal a las personas que ingresen al campo de O&P. Muchos de los miembros del personal (antiguos y actuales) que han trabajado con Ron en POPS en el centro de atención de Tampa son graduados orgullosos del programa en SPC; un dato curioso que hizo sonreír a Ron mientras recordaba.
"Tenemos un gran equipo aquí; no he hecho esto solo", dijo Ron. "Comparto todos mis éxitos con ellos; no podría haberlo logrado sin su ayuda. Lo hicimos juntos".
Conexión con los niños y cierre de una etapa
Ron siempre minimiza sus logros y, en su lugar, elige concentrarse en los niños. No obstante, abundan los elogios por parte de sus equipos de liderazgo, de sus colegas y de los familiares de nuestros pacientes. "El Sr. Ron ingresó a nuestra sala de examen en el primer viaje que hicimos al centro de atención de Tampa y nos hizo sentir bien", contó Sandy, cuya hija, Momo, es paciente del centro Shriners Healthcare de Florida. "Fue muy amable y explicó cada detalle. Nos hizo sentir cómodos inmediatamente; le estaré por siempre agradecida".
Luego de compartir los sentimientos de Sandy con Ron, él admitió que interactuar con nuestros pacientes fue la mejor parte del trabajo. Él ve su carrera como una bendición. En definitiva, la polio que una vez lo paralizó le dio propósito a su vida. "El día que me gradué de la escuela técnica, recé para que Dios me guiara para hacer algo significativo con mi carrera", dijo Ron. "Los Hospitales Shriners para Niños ayudaron a hacer eso posible".
El legado de Ron y el siguiente capítulo de su historia
Le agradecemos a Ron sus años de liderazgo y experiencia, ya que siempre defendió y se comprometió con la misión de manera desinteresada. Ese tipo de devoción es exactamente la razón por la cual tuvo un gran impacto en muchas personas.
Su hija, Michelle, quizás lo expresó mejor: "Su legado es visto en los incontables niños que se beneficiaron de su dedicación, así como el alto nivel de atención que fijó para la profesión".
¡Felicitaciones, Ron! Gracias por todo, ¡y disfrute su jubilación!
Manténgase en contacto
Únase a nuestra lista de correo para mantenerse actualizado sobre todo lo que sucede en Shriners Children's.