Más rápido y más seguro

La máquina de radiografía de EOS facilita el tratamiento de pacientes como Madison

No piense en un elefante violeta.

Pensó en un elefante violeta, ¿no? A Madison, una residente de 16 años de Murphysboro, Illinois, le ocurría algo similar cuando los técnicos en radiología le decían que se quedara quieta para hacer la radiografías al comienzo de su tratamiento de la escoliosis hace 3 años y medio en los Hospitales Shriners para Niños de St. Louis.

“Cuando alguien te dice que te quedes quieta, es difícil hacerlo”, explicó. “Me pone un poco inquieta”.

Madison no es la única, dijo Melissa Warren, técnica en radiología que hace 20 años que trabaja en el hospital. Ha tenido que volver a hacer muchas radiografías de pacientes que se movieron en algún momento del minuto de quietud requerido en las radiografías tradicionales. Sin embargo, gracias a una nueva tecnología, muchos pacientes del Hospital Shriners de St. Louis son capaces de hacerse radiografías mucho más rápido. La máquina se llama EOS y reduce el tiempo de quietud requerido a aproximadamente 11 segundos. Esto hace sonreír a Madison.

“Es mucho más fácil”, expresó. “Cuando no tienes que quedarte quieta por mucho tiempo, no te preocupas por ponerte inquieta”.

Según explicó el jefe de personal, Scott Luhmann, M.D., la máquina del Hospital Shriners de St. Louis tiene muchas ventajas además del factor de la quietud.

Una de las principales ventajas es que proporciona una imagen más completa con mucha menos radiación que los niveles ya seguros de las radiografías tradicionales. Esto es beneficioso para los pacientes de los Hospitales Shriners, ya que varios de ellos deberán hacerse una gran cantidad de radiografías durante su tratamiento. En algunas situaciones, la radiación es un 95% menos que en las radiografías tradicionales y equivale a lo que una persona absorbe naturalmente en una semana simplemente por ser un ciudadano de la Tierra.

El equipo también tiene una silla con varias correas para ayudar a los pacientes que no se pueden sentar de forma independiente a realizarse radiografías sin que haya padres o técnicos sosteniéndolos.

“Esto significa que tampoco reciben exposición adicional a la radiación”, explicó el Dr. Luhmann.

Además, la máquina ayuda a que el hospital sea más eficiente. Menos tiempo por radiografía equivale a más pacientes radiografiados.

“Cuando comenzamos a usar EOS, mejoró el flujo del día en la clínica”, dijo Melissa. “Podemos atender a más pacientes y esos pacientes tienen una vista más sencilla”.

La máquina costó 900,000 USD y se compró usando únicamente fondos donados. Ha tomado alrededor de 20.000 imágenes de pacientes desde que fue encendida en octubre de 2018.