Del plato al progreso: El papel de la nutrición en la curación de los niños

A medida que marzo despliega sus colores vibrantes, no son sólo los jardines florecientes los que llaman nuestra atención. Este mes también marca la celebración del Mes de la Buena Nutrición, iniciado por la Academia de Nutrición y Dietética. Esto es un recordatorio para que todos hagamos una pausa y consideremos la importancia de elegir alimentos con conocimiento de causa y fomentar hábitos saludables de alimentación y actividad física.

El modelo de atención integral de Shriners Children's integra a nutricionistas clínicos y dietistas registrados que supervisan diligentemente a los pacientes durante las etapas graves y de rehabilitación. Llevan su experiencia en todo el país, ayudando a pacientes desde las soleadas costas de Hawái hasta las bulliciosas calles de Filadelfia.

"Los dietistas son especialistas en nutrición que sirven como parte esencial del equipo interdisciplinario de su hijo", dijo Sara Ausmus, dietista clínica del Hospital Shriners para Niños Greenville. "Diseñan planes de atención médica individualizados para garantizar que su hijo tenga una nutrición equilibrada para apoyar la curación posoperatoria, al tiempo que brindan educación nutricional a las familias".

Los alimentos ayudan a todas las lesiones

Ya sea por la emoción de los deportes, la alegría de las aventuras en el patio de recreo o el simple placer de correr libremente, los niños son susceptibles a sufrir lesiones en sus actividades. Con sus placas de crecimiento aún abiertas durante el desarrollo (la parte más susceptible de su sistema esquelético), pueden ocurrir lesiones por uso excesivo, derivadas de movimientos repetitivos durante el juego. Es vital para el proceso de curación el consumo de nutrientes adecuados, indispensables para facilitar una pronta recuperación.

"La dieta y la nutrición cumplen un papel muy importante cuando se trata de recuperarse de una lesión, incluso si se trata de una lesión relacionada con el deporte", dijo Mike Szymendera, dietista registrado del Hospital Shriners para Niños Philadelphia. “Una buena nutrición proporciona al cuerpo nutrientes clave para reconstruir el tejido lesionado. El tiempo de recuperación se puede acortar si permite que su cuerpo consuma la cantidad adecuada de nutrientes clave. Por ejemplo, si un atleta se lesiona un ligamento o un tendón, una nutrición adecuada le permitirá recuperarse a un ritmo más rápido que un individuo que no se centró en una nutrición adecuada”.

“En lesiones deportivas pediátricas la recuperación, la dieta y la nutrición son esenciales para promover la curación, reducir la inflamación y apoyar la recuperación muscular”, dijo Annabelle Toll, dietista registrada del Hospital Shriners para Niños Northern California. “Como dietista pediátrica, enfatizo la importancia de una nutrición equilibrada, una hidratación e ingesta energética adecuada para apoyar la actividad física y la recuperación de los niños. Por ejemplo, puedo recomendar alimentos ricos en nutrientes, como proteínas magras, cereales integrales, frutas y verduras, para favorecer la reparación de los tejidos y proporcionar antioxidantes para reducir la inflamación. Además, hemos trabajado con los atletas para asegurarnos de que estén debidamente hidratados antes, durante y después de la actividad física para optimizar el rendimiento y la recuperación.

Nutrición para pacientes quemados

En los centros de quemados de Shriners Children's, los dietistas registrados se dedican a garantizar que los sobrevivientes de quemaduras experimenten una curación de adentro hacia afuera, reconociendo que las lesiones por quemaduras pueden imponer uno de los desafíos nutricionales más importantes al cuerpo, particularmente para los niños.

"Después de sufrir una lesión traumática, como una quemadura que pone en peligro la vida, uno se vuelve hipermetabólico y las necesidades nutricionales aumentan", dijo Mike. “En algunos casos, las necesidades nutricionales se duplican, y esto puede llegar a ser difícil de conseguir a diario para los pacientes. Algunos pacientes pueden necesitar una sonda de alimentación para satisfacer sus necesidades tan exigentes. Por eso es importante trabajar con un dietista registrado para establecer metas y expectativas, y diseñar un plan y una estrategia para lograrlas”.

Inmediatamente después de una lesión por quemadura se produce el hipermetabolismo, es decir, el organismo tiene una tasa metabólica superior a la normal. El hipermetabolismo puede empeorar con los procedimientos quirúrgicos, el dolor y la ansiedad. Cuanto mayor sea la quemadura, mayor será el impacto. Debido a esto, es importante comenzar un plan de nutrición dentro de las 24-48 horas posteriores a una lesión por quemadura para contrarrestar este estado hipermetabólico. Este estado puede durar hasta dos años después de una lesión por quemadura y puede provocar desnutrición.

"Un paciente con una lesión por quemadura tendrá un aumento significativo en sus necesidades de calorías, proteínas y líquidos para favorecer la curación de la herida", dijo Heather Moriyama, gerente de Servicios de nutrición del Hospital Shriners para Niños Hawaii. “También será necesario aumentar las necesidades de determinados nutrientes como el zinc y el hierro. Si la lesión afecta la capacidad del paciente para comer o tragar, puede ser necesaria una dieta de consistencia modificada o alimentación por sonda para proporcionar una nutrición adecuada”.

Por qué es importante un buen plan de nutrición

La desnutrición tiene el potencial de afectar negativamente la recuperación de un niño, incluida la cicatrización de heridas, las tasas de infección y la duración de la hospitalización. Los niños son más vulnerables a la desnutrición, ya que a menudo tienen menos reservas nutricionales, todavía están creciendo y requieren de la nutrición tanto para crecer como para sanar después de una lesión.

"Después de una lesión traumática, los pacientes tienen una necesidad mucho mayor de calorías, proteínas, vitaminas y minerales", dijo Jenny Shiel, dietista registrada del Hospital Shriners para Niños Boston. “El cuerpo necesita especialmente proteínas adicionales (opciones que incluyen huevos, legumbres, carnes y lácteos) para curar las zonas lesionadas y para sanar después de las cirugías. A veces, estas mayores necesidades no pueden satisfacerse únicamente con la dieta y es posible que se necesite apoyo nutricional. Los dietistas registrados pueden desarrollar planes nutricionales individualizados para satisfacer estas necesidades utilizando suplementos nutricionales orales, nutrición enteral o parenteral”.

Para los pacientes que se recuperan de una cirugía, la dieta es muy importante. Según Sara, tras la cirugía, el apetito de la mayoría de los niños disminuye durante unos días o algunas semanas debido a la anestesia, el dolor y los medicamentos que pueden provocar somnolencia, náuseas o estreñimiento.

"Los pacientes suelen necesitar comidas y refrigerios ligeros y fáciles de digerir durante uno a tres días después de la cirugía, dependiendo del procedimiento y de si el niño experimenta náuseas posoperatorias", explicó Sara. “Si su hijo tiene náuseas, fomente comidas blandas y refrigerios suaves, evitando los alimentos grasosos, picantes y ácidos para favorecer la tolerancia. Si su hijo tiene poco apetito, intente ofrecerle de cinco a seis comidas y refrigerios pequeños al día, incentivando el consumo de carnes, pescado, nueces, legumbres y lácteos ricos en proteínas para promover una nutrición adecuada para la curación”.

"La ingesta adecuada de nutrientes como proteínas, vitamina A, vitamina C y zinc es importante para la cicatrización de heridas, la reparación de tejidos y la función inmune después de la cirugía", dijo Heather.

"Para nuestros pacientes de rehabilitación se aplican todos los factores anteriores”, dijo Annabelle. “Esta población de pacientes suele tener una lesión en la cabeza, un derrame cerebral u otras afecciones neurológicas que afectan su capacidad para tragar. La disfagia puede limitar la capacidad del paciente para comer y beber de forma segura, lo que puede provocar desnutrición si no se trata. Trabajamos estrechamente con estos pacientes para encontrar cosas que les gusten comer con la textura aprobada. Los dietistas de rehabilitación trabajan muy de cerca para ajustar y controlar su nutrición enteral y sus líquidos a medida que comienzan a comer más. Algunos pacientes seguirán necesitando nutrición enteral para complementar su ingesta de alimentos, mientras que otros dejarán la nutrición enteral por completo”.

Una carrera satisfactoria

"Una de las mejores partes de ser dietista registrada en Shriners Children's es el increíble equipo de atención multidisciplinario del que formamos parte todos los días", dijo Jenny. “Participamos en rondas diarias con otros miembros del equipo de atención para revisar las actualizaciones, necesidades y objetivos de los pacientes para el día. Esto marca la pauta del día para que todos estén en sintonía y los pacientes puedan recibir la mejor atención posible. Al trabajar tanto en entornos hospitalarios como ambulatorios, podemos ver a los pacientes progresar a lo largo de sus planes de tratamiento, y es sorprendente verlos crecer y prosperar después de recuperarse de lesiones o cirugías importantes. Ver crecer a los pacientes ha sido una de las partes favoritas de mi trabajo.