Desarrollar la pasión por el atletismo
Noelle siempre ha sido atleta en su esencia.
Antes de sentirse cómoda en su dualidad como estrella paralímpica y a la vez atleta de la División I, Malkamaki siempre apreció la comodidad que sentía en Shriners Children's, donde se atiende desde temprana edad.
Malkamaki llegó a este mundo sin mano derecha ya que nació con síndrome de bandas amnióticas, pero como niña, esto nunca la hizo detenerse.
Es oriunda de Decatur, Illinois, y comenzó a asistir al Hospital Shriners para Niños antes del jardín de infantes. Dijo que era uno de los pocos espacios que parecía realmente construido para ella. Sabía que en el Hospital Shriners para Niños los médicos, el personal y otros pacientes y familiares no la mirarían de forma extraña. Allí podía sentirse normal respecto a su diferencia de extremidades.
"Desde muy temprana edad me sentí priorizada en el Hospital Shriners para Niños" dijo Malkamaki. "Me sentía bien allí porque todos querían venir a hablar conmigo, lo cual era muy agradable de pequeña. Shriners ha sido un lugar donde se prestó atención a mis necesidades, y eso realmente lo aprecié. Cada una de las prótesis fue distinta, y la atención al detalle fue genial. Probé todos los deportes posibles en la infancia. Sentí un nivel de comodidad, sentí que no tenía por qué tener ningún límite en lo que intentaba, porque siempre podíamos ir al Hospital Shriners para Niños y ellos nos ayudarían a encontrar una solución con las prótesis".
Desde muy temprana edad me sentí priorizada en el Hospital Shriners para Niños. Me sentía bien allí porque todos querían venir a hablar conmigo, lo cual era muy agradable de pequeña.
La trayectoria atlética de Malkamaki se debe no solo al desarrollo físico del deporte que practica, sino también a su crecimiento mental. La joven de 23 años compitió contra atletas sin discapacidades la mayor parte de su vida y fue lanzadora de bala en la Universidad DePaul en la División I. Luego comenzó con el lanzamiento de bala en atletismo adaptado. Instantáneamente se convirtió en una estrella, estableciendo récords mundiales desde el primer minuto. No le resultó fácil dejar su puesto de lanzadora de bala D1, donde dijo que no era la mejor del equipo, y pasar a las competencias paralímpicas, donde era la mejor del mundo.
Le resultó un desafío prepararse para las competencias paralímpicas, y al principio no sabía cómo desenvolverse al no tener puesto el uniforme de DePaul. Sin embargo, aprendió a construir una identidad fuerte como atleta, sin importar contra quién estuviera compitiendo. A partir de ahí, creció exponencialmente.
"A cualquier joven paratleta que esté considerando optar simultáneamente por hacer deportes para deportistas con y sin discapacidad, le diría que lo haga sin dudarlo", afirmó Malkamaki. "Es una de las cosas más difíciles que he hecho, pero me ha permitido crecer mucho como deportista y conocerme mucho más a fondo. Lo más útil es que trabajen para consolidar la identidad como atleta. Cuando pude batir el récord mundial en las pruebas me sentí genial, fue exactamente lo que había esperado".
Malkamaki admitió que ser considerada la favorita para el oro de cara a los Juegos de París es algo bueno y malo al mismo tiempo. Ha tenido la oportunidad de tomar más riesgos en sus entrenamientos, pero al ser poseedora del récord mundial y ser la candidata favorita al oro para EE. UU., la presión que se siente es de otro nivel. Los Juegos Paralímpicos comienzan el 28 de agosto.