El diagnóstico intrauterino de pie zambo puede causar preocupación a los padres primerizos. Sin embargo, esta familia estaba tranquila debido a su propia historia de superación del pie zambo con la ayuda de Shriners Children's.
Brent y su esposa, Jilyn, tomaron el diagnóstico con calma, cuando otros padres podrían haberse alarmado. Hasta el técnico ecografista se inquietó. El examen reveló que su hija tenía pie zambo.
Supo de primera mano, debido a su propio tratamiento en Hospital Shriners para Niños Salt Lake City y Hospital Shriners para Niños Portland, que, con la intervención y el tratamiento adecuados, el pie de su hija podría cambiar y darle completa libertad para participar en actividades y practicar deportes. Brent nunca estuvo nervioso porque sabía exactamente qué hacer. Llamó al Hospital Shriners para Niños Salt Lake City antes de que su hija naciera.
La historia de su familia
El pie zambo puede estar relacionado con una combinación de factores genéticos y ambientales, y tener antecedentes familiares puede aumentar las posibilidades de que un niño nazca con la afección. Aunque ya tenían dos hijos que habían nacido sin pie zambo, Brent y Jilyn estaban preparados para la posibilidad. Hasta Brent describió haberse sentido feliz ante la posibilidad de regresar a su adorado hospital para buscar atención para su beba Kendyl.
Tratamiento del pie zambo de Kendyl
La familia de Kendyl condujo desde Chubbuck, Idaho, hasta Salt Lake City, Utah, para comenzar la colocación de enyesados en serie de la beba de apenas 10 días de vida. El plan de tratamiento personalizado ha sido exitoso, incluido el método Ponseti y una cirugía realizada por la jefa de asistentes del personal, Theresa Hennessey, M.D., para darle algo más de flexibilidad.
«Los médicos dicen que todo se ve bien», dijo Brent.
El método Ponseti es la técnica más utilizada hoy en día para tratar a los niños con pie zambo. Incluye masajes y enyesado en serie, tenotomía de Aquiles en la mayoría de los casos y férulas, disponibles en casi todas las sedes de Shriners Children’s.
Kendyl, que ahora tiene 5 años, ha sido una paciente feliz desde el comienzo y ha contribuido con su atención. Con tan solo 2 años, les llevaba la férula nocturna a sus padres a la hora de irse a dormir.
Antes de su tratamiento, los padres de Kendyl realizaron un molde del pie para conservar de recuerdo y poder mostrarle a Kendyl su notable transformación cuando sea más grande. El molde muestra cómo caminaría de costado y la parte superior del pie si no hubiera sido por su intervención temprana.
No se detiene... Sigue y sigue y puede mantener el ritmo de sus hermanos. Sin la atención que recibe en el Hospital Shriners para Niños Salt Lake City, no podría hacer nada de eso.
Atención y cariño
Brent no tiene más que agradecer por la atención que le cambió la vida, pero reconoce que los métodos de tratamiento del pie zambo se modernizaron desde que era pequeño. Ve cómo Shriners Children's se adaptó. Aunque pasaron décadas, Brent, que ahora tiene cuarenta años, recuerda bien su experiencia con el pie zambo. Tanto el Hospital Shriners para Niños Portland como el Salt Lake City tuvieron que ver con su atención, dándole la posibilidad de vivir la vida al máximo: camina, corre e incluso practica ciclismo de montaña.
El tratamiento de Brent incluyó una serie de cirugías y férulas desde la cadera hacia abajo. Esto es muy diferente a los tratamientos actuales, en los que la cirugía es menos necesaria y el uso de férulas es mínimo.
«En aquella época, las intervenciones eran más invasivas», explicó.
Lo que no cambió es la atención y el cariño, un denominador común que ve a lo largo de su experiencia y la de Kendyl. Recuerda que el personal lo hacía sentir como «el mejor niño del planeta», y esa cultura se mantiene hoy en día.
«Todo el mundo allí hace que Kendyl se sienta de maravilla», expresó Brent, y se asombra ante la compasión.
«Todas las personas que intervinieron en el cuidado de Kendyl fueron estupendas, desde los recepcionistas hasta los médicos. Todos la hacen sentir especial», dijo Brent. «No todos los hospitales son así»
También aprecia cómo hacen sentir a su hija. «Los médicos hacen un buen trabajo asegurándose de que las preguntas de Kendyl se respondan y que se sienta segura», mencionó Brent. «Si se encuentra en una situación nueva, deja de hablar, pero durante el largo viaje de regreso a casa, charla sobre su experiencia positiva, incluso sobre los detalles más pequeños, como las coloridas salas de la clínica».
Juntos en esto
Sus experiencias compartidas sirvieron de vínculo entre ambos, padre e hija. En cada paso del tratamiento de Kendyl, Brent tuvo la oportunidad única verse reflejado. Cuando a ella le pusieron escayolas, él le mostró fotos de las suyas.
«Puedo decir con certeza que esto va a salir bien», dijo Brent. «No pasamos tiempo llorando ni preguntándonos por qué nos ha pasado esto. Para nosotros, se trata agradecer por el equipo y la atención especializada».
Esperanza para el futuro
Kendyl desea empezar el jardín de infantes el año que viene y tiene una gran variedad de intereses y habilidades. Es una niña increíblemente creativa a la que le encantan los rotuladores, los lápices de colores y pintar. Su vívida imaginación la ayuda a inventar historias. Luego de su última operación en la primavera del 2021, el pie zambo quedó en el pasado y ahora puede poner todas sus energías en aprender, hacer amigos y divertirse.
«Ella no para: va y va y va. Es capaz de seguir el ritmo de sus hermanos mayores», expresó Brent. «Sin la atención de Shriners Children's, no podría hacer nada de eso».