Conozca a Camden
El disfraz de Halloween de Camden en honor al Dr. Sheridan.
Para su alegría, Camden estaba vestido como el jefe de personal, Robert L. Sheridan, M.D. La visita coincidió con la celebración de Halloween y Cam quiso festejar la ocasión con un disfraz en honor a uno de sus médicos favoritos. Un uniforme, una bata blanca y un estetoscopio completaban el look.
Cam tenía 18 meses cuando se quemó después de tocar accidentalmente el motor caliente de un soplador de hojas mientras su familia trabajaba en su propiedad. Los padres de Cam, Erin y Jeff, sabían que su mano necesitaba atención inmediata y lo llevaron a un hospital local. Allí, los médicos examinaron la lesión de Cam y determinaron que necesitaría atención especializada para las quemaduras, y organizaron el traslado al Hospital Shriners para Niños Boston. Cuando llegó la familia, el equipo de atención de Cam estaba esperando en su habitación. Después de examinar la lesión por quemadura, los miembros del personal desbridaron y vendaron la herida. El desbridamiento de una herida por quemadura implica eliminar el tejido dañado, lo que ayuda a la curación. Al día siguiente, a Cam le colocaron un yeso en la mano y comenzó fisioterapia. Cam estuvo tres días en el hospital y, luego, debió viajar al Hospital Shriners para Niños Boston desde su casa en el oeste de Massachusetts cada dos días durante aproximadamente dos meses.
Ahora, con casi cinco años y superada la fase inicial de su recuperación, Cam regresa al Hospital Shriners para Niños Boston para visitas de seguimiento cada cuatro o seis meses. El equipo de atención evalúa regularmente qué tan bien está sanando su mano y monitorea de cerca su rango de movimiento. A medida que un niño crece, las cicatrices de quemadura no crecen con ellos y, en ocasiones, es necesario realizar procedimientos de seguimiento para lograr un uso óptimo. El grado del rango de movimiento que logra Cam con su mano lesionada ayudará a determinar el tratamiento futuro.
Mientras Erin reflexionaba sobre el accidente que lesionó a Cam, señaló: “Una nunca piensa que este podría ser su hijo, que su bebé podría resultar herido de esta manera. Sin embargo, se puede ver una luz a través de este sombrío acontecimiento”.
Una nunca piensa que este podría ser su hijo, que su bebé podría resultar herido de esta manera. Sin embargo, se puede ver una luz a través de este sombrío acontecimiento.
Erin compartió que, especialmente en los primeros días después de la lesión de Cam, le ayudó hablar con otros padres de niños con lesiones por quemaduras. “Nunca olvidaré que, el segundo día, fui al área de juegos con Cam y hablé con una madre que llevaba allí tres meses con su bebé”. Erin recuerda haber quedado impresionada por el progreso que había hecho el bebé, así como por la felicidad y el entusiasmo del niño. “Me dio la esperanza de que algún día Cam también podría volver a usar sus manos como antes”, dijo.
Los especialistas en la primera infancia del Hospital Shriners para Niños Boston fueron muy importantes a la hora de hacer que Cam se sintiera cómodo en un momento tan aterrador. Erin dijo que fueron especialmente importantes cuando Cam necesitó un injerto de piel el año pasado. “No puedo imaginarme haber pasado por esta experiencia sin ellos”, agregó.
Erin también compartió cómo el tiempo que su familia pasó en el Hospital Shriners para Niños Boston les ha dado esperanza de maneras que no imaginaban. “Estar en Shriners me ha dado esperanza de muchas otras maneras, no solo con Camden. Me ha dado esperanza para nuestra sociedad futura. Ver a los niños interactuar entre ellos, no juzgarse unos a otros, no dejar que los idiomas sean una barrera y aceptarse de inmediato como amigos me demuestra que hay esperanzas para nuestro mundo”, dijo Erin.
La familia tiene muchos momentos favoritos en Shriners Children's, que incluyen asistir a celebraciones durante las fiestas y participar en la terapia con mascotas. Además, por supuesto, a Cam le han encantado los festejos de Halloween.
Para los padres de niños que sufrieron lesiones por quemaduras, el camino hacia la sanación y la recuperación, a veces, puede parecer muy largo. Para Erin y su familia, en algunos momentos parecía como si estuvieran en un túnel oscuro. “Pero si te detienes y piensas en las luces brillantes que te guían hacia la luz del sol, te das cuenta de que hay más luces de las que puedes contar. Los médicos, las enfermeras, los terapeutas, el personal de seguridad, los especialistas en la primera infancia, los asistentes administrativos y todos los demás empleados nos brindan la fuerza de voluntad para mantenernos fuertes por nuestros hijos y por nosotros mismos”, dijo.
Para Cam, algunos empleados en particular realmente han causado una gran impresión. “La fisioterapeuta de Cam, Aimee, y el cirujano, el Dr. Sheridan, realmente han cambiado nuestras vidas. Ambos han acompañado a Cam desde el primer día. Pide verlos cada vez que tenemos una cita en “mi Boston”, como él lo llama. ¡Son los ángeles guardianes de nuestras familias! También adora a Ernesto, el encargado de la inscripción de los pacientes. Le encanta hablar con él cuando entramos y salimos”, dijo Erin.
Cuando Cam llegó a esa cita clínica vestido como el Dr. Sheridan, se aseguró de visitar a algunos de sus amigos del Hospital Shriners para Niños Boston, quienes quedaron conmovidos por la creatividad y consideración de su disfraz.