Zoe está persiguiendo sus sueños
Gracias a la atención más increíble que existe, Zoe está haciendo realidad sus sueños.
A las 18 semanas de embarazo y esperando ansiosamente el nacimiento de su bebé, Mindy, la madre de Zoe, fue informada de que algo parecía preocupante. A Zoe le faltaba la parte inferior del antebrazo izquierdo y la mano. “Vaya, estaba asustada”, dijo Mindy. “Quería que mi bebé fuera 'perfecto' como todas las mamás”.
Los investigadores estiman que alrededor de uno de cada 1.900 bebés nace con una deficiencia de las extremidades en los Estados Unidos. Los niños que nacen con una deficiencia de las extremidades a menudo enfrentan diversas dificultades según la ubicación y el tamaño de la reducción de la extremidad, como la necesidad de asistencia con las actividades diarias y limitaciones con ciertos movimientos, deportes o actividades.
Me preguntaba cómo se pondría la camisa, se cepillaría el pelo o los dientes. En mi mente, pensé que no sería capaz de hacer nada, y estaba realmente asustada.
Entonces, Mindy encontró refugio en el Hospital Shriners para Niños Greenville. Con un departamento de rehabilitación propio, así como Servicios de ortesis y prótesis pediátricas (POPS), Zoe recibe atención integral para todas sus necesidades ortopédicas.
“Zoe aprendió rápidamente a ser más independiente”, dijo Mindy. Utilizando dispositivos de adaptación especializados fabricados en nuestro departamento de POPS, Zoe aprendió a andar en bicicleta y hacer una voltereta. En el segundo piso del Hospital Shriners para Niños Greenville, puede encontrar a Zoe trabajando con ergoterapeutas, enseñándole cómo adaptarse a la vida diaria: cómo cepillarse los dientes y el cabello, y cómo vestirse.
“Le enseñaron cómo hacer posible lo imposible, pero lo más importante es que le enseñaron a Zoe cómo ser una líder”, dijo Mindy.
Como Embajadora para Pacientes, Zoe disfruta asistir a eventos en nombre del hospital, contar su historia y agradecer a las organizaciones que le brindaron las herramientas para “ser simplemente una niña”.
“Shriners Children's y Shriners en todas partes nos han quitado un gran peso de encima”, dijo Mindy. “Recibimos la mejor atención y estamos rodeados de personas que la alientan y le enseñan a vivir su vida al máximo”.
Zoe, que ahora tiene 8 años, disfruta jugar al golf adaptado con dos equipos juveniles adaptados: el de la Fundación Never-Say-Never-Foundation y el de la Asociación Norteamericana de Golfistas con un Solo Brazo. "Siempre damos las gracias a Shriners Children's porque cuando cruzas esas puertas, ya no tienes que preocuparte".