La escoliosis nunca detuvo sus sueños
Iruy tiene 14 años y ha sido pacientes del hospital Shriners por un año; un año que ha significado un gran reto para ella y su familia.
Fue a principios de 2021 cuando a ella y a su familia les detectaron Covid, y, por consiguiente, se les realizaron un gran número de placas de Rayos X; fue en ese momento que el radiólogo les comentó a los papás de Iruy que ella padecía escoliosis y que sería necesario iniciar un tratamiento. “Cuando se la detectaron, nosotros no sabíamos ni que era la escoliosis, y fue gracias a un médico de Puebla, que pudimos llegar al Hospital Shriners”, Comenta Yuridia, mamá de Iruy.
¿Qué es la escoliosis?
Se trata de una deformación progresiva de la columna normalmente en forma de “C” o “S en lugar de desarrollarse en línea recta. Con el tiempo, la curvatura puede empeorar, lo cual da lugar a que sea más notoria y que provoque dolor.
Antes de ser diagnosticada con escoliosis, Iruy era toda una deportista consumada. Desde muy chica sentía agrado por practicar el Taekwondo, y la Danza. En el deporte marcial llegó a conseguir 11 medallas de oro en la categoría de formas y tres medallas de oro en la categoría de combate. “El Taekwondo es un deporte olímpico, pero más enfocado al combate; si en algún momento se llega a incluir la categoría de ‘formas’ en los juegos olímpicos me gustaría poder competir y ganar una medalla de oro; ese es uno de mis sueños”, comenta Iruy.
Hoy soy niña Shriners y les agradezco infinitamente por aceptarme como paciente y saber que muy pronto podré continuar con la realización de mis sueños.
Camino a la recuperación
Y aunque aún el camino es largo en torno al tratamiento de Iruy contra la escoliosis, ella no pierde el entusiasmo de recuperarse y continuar con sus sueños pues en febrero de este año, recibió su primera cirugía de columna, por lo que ahora deberá tomar terapia física para así, poco a poco, regresar a las actividades que tanto disfruta. “Aún tenemos una consulta más donde el médico le indicará qué deporte puede continuar haciendo”, comenta la mamá de Iruy.
Para Iruy su sueño más grande es poder continuar con su carrera como taekwondoista y estudiar Danza de forma profesional para poder enseñar a otros a bailar. El camino es largo, pero Iruy es muy fuerte y confía en que muy pronto podrá nuevamente portar su dobok (uniforme para Taekwondo) y presentarse en sus clases de baile.
Por su parte, los papás de Iruy están muy agradecidos con todo el tratamiento que el Hospital Shriners ha brindado a su hija, y envían un mensaje muy especial a los padres de familia que están pasando por un diagnóstico de escoliosis, “Apoyen a los niños, échenle muchas ganas, fuerzas y valor; pues se debe trabajar con nuestros hijos tanto física como emocionalmente. El Hospital le brindó una segunda oportunidad a mi hija, y se convirtió en esa luz al final de tanta oscuridad”, comentó Yuridia, mamá de Iruy.
Iruy, quien actualmente aún se encuentra en recuperación de su primera cirugía, nos comparte lo siguiente: “Hoy soy una niña Shriners y les agradezco infinitamente por aceptarme como paciente y saber que muy pronto podré continuar con la realización de mis sueños”.