En primer plano: Lori Turgeon, directora de servicios terapéuticos

Lori Turgeon, PT, DPT ha sido un valioso miembro del personal del Hospital Shriners para Niños Boston desde 2006. Lori, fisioterapeuta que se graduó de la Universidad Northeastern, trabajó como terapeuta de personal hasta 2018, cuando asumió el cargo de dirigir el Departamento de Servicios Terapéuticos. “Desde una perspectiva gerencial, disfruto ocupar un espacio de importancia y poder defender a mi equipo. Gran parte del trabajo que realizan nuestros especialistas en la primera infancia así como nuestros fisioterapeutas y ergoterapeutas es vital para nuestros pacientes, tanto desde un punto de vista psicosocial como físico. Poder asegurarme de que nuestro equipo brinde lo que ellos necesitan es muy gratificante”, compartió Lori.

Lori y su equipo, un grupo de talentosos proveedores de atención médica, ayudan a los pacientes a dar pasos importantes hacia una mejor gestión del cuidado de quemaduras y rehabilitación.

Lori supervisa los equipos de servicios terapéuticos y primera infancia, así como el Departamento de Fotografía Médica, que incluye 10 empleados de tiempo completo, entre 15 y 20 asociados por día y tres relaciones con proveedores diferentes. Una de ellas es una empresa de equipos médicos que proporciona a los pacientes prendas para el tratamiento de cicatrices. Las otras dos involucran servicios contratados. Desde hace varios años, el hospital tiene un acuerdo con un especialista en maquillaje que ofrece una clínica y enseña a los pacientes cómo usar maquillaje reconstructivo para cicatrices visibles. Lori también supervisa la relación con el equipo de foniatría del Hospital General de Massachusetts para el programa de labio leporino y paladar hendido.

Si bien cada especialidad dentro de su departamento tiene un enfoque único, todas comparten el mismo objetivo. “A la hora de ayudar en la recuperación de un niño, es importante cultivar una dinámica positiva entre el paciente, la familia y el terapeuta. Trabajamos para comprender sus objetivos y sus necesidades clínicas para poder apoyarlos adecuadamente y lograr los mejores resultados”, explicó Lori.

El equipo de primera infancia trabaja principalmente en el apoyo centrado en el paciente y la familia junto con la recuperación psicosocial como fundamento. Nuestros especialistas en la primera infancia ayudan a reducir el estrés y la ansiedad durante el tiempo que el paciente y la familia están en el hospital a través de juegos apropiados para su edad para ayudar a desarrollar habilidades de afrontamiento.

El equipo de terapia trabaja individualmente con los pacientes para ayudarlos a recuperar la fuerza, la confianza y la independencia. Los fisioterapeutas y ergoterapeutas desarrollan planes apropiados para cada paciente individual y trabajan con los niños para ayudarlos a volver a estar sanos y activos. Este es un componente importante pero a veces desafiante del proceso de recuperación.

Nuestra fotógrafa médica Sue siempre está dispuesta a ayudar a cualquier persona en cualquier momento. “Ella conoce este lugar por dentro y por fuera, y casi todos los equipos clínicos del hospital la ha adoptado ya que trabaja en conjunto y se lleva bien con todos. Además, siempre tiene una actitud positiva”, compartió Lori.

Antes de la pandemia, el equipo de Lori apoyó varios programas de recuperación en el Hospital Shriners para Niños Boston. Esto incluye un programa de bienestar, una colaboración entre el personal de primera infancia, terapia y nutrición para brindar educación sobre el bienestar a los pacientes y sus familias. Otros programas incluyen terapia con mascotas, donde animales de servicio entrenados visitan pacientes, y Team Brave, un programa de reintegración comunitaria patrocinado por la Fundación de Quemaduras de Bomberos de Boston. Cada programa está diseñado para brindar una mejor salud y bienestar a los pacientes y sus familias después de una lesión. Si bien se suspendieron algunos programas debido a la COVID-19, se está planificando la reanudación segura de estas actividades.

A lo largo de su carrera en el Hospital Shriners para Niños Boston, Lori se ha maravillado con la resiliencia de sus pacientes. Al reflexionar sobre algunas de sus interacciones favoritas con los pacientes, Lori habló sobre la increíble fortaleza de los niños con los que trabaja. Un día, una paciente llegó al Hospital Shriners para Niños Boston desde su país de origen, Belice, con una lesión por quemadura extensa que resultó en la pérdida de muchos de sus dedos. A pesar de su lesión, la paciente logró su recuperación con determinación y gracia, y se convirtió en una inspiración extraordinaria para otros pacientes y el personal del hospital. Después del procedimiento, participó en muchos de los programas de rehabilitación ofrecidos, escribió sus sentimientos en canciones durante la musicoterapia y ganó fuerza y confianza a través de las salidas del Team Brave, como montar a caballo y hacer yoga.

Otro paciente con quemaduras llegó al Hospital Shriners para Niños Boston desde Honduras después de sufrir quemaduras graves que causaron la pérdida de funciones en sus manos. A pesar de los desafíos de su rehabilitación, este fuerte adolescente mantuvo una comunicación increíble con su equipo de atención y se mantuvo motivado para mejorar, incluso llegó a ayudar a alentar e inspirar a otros pacientes. Lori compartió que ver el progreso de este joven es un impulso increíble para el personal. “Nos inspira saber que nuestro trabajo es importante y que realmente marca la diferencia”, comentó.